En la mitología de los gitanos de Asia central, existen indicativos de que alguna vez veneraron al sol, personificado en el dios sol Obersshi. En algunas áreas la luna se consideró una deidad, y los gitanos escandinavos la conocían como Alako. Todas las tribus gitanas se reunían para celebrar la luna llena y en esa etapa de la luna se celebraban las bodas y los bautizos. La luna llena era, y sigue siendo en muchos lugares, un momento de celebración.
Chanti, el festival de Ghanesa, la deidad india con cabeza de elefante, es una celebración al sol. Los gitanos occidentales lo festejan durante el Lugnasadh, la víspera del Rabat de agosto wicano. Se cree que es de muy mala suerte ver directo a la luna durante esta celebración.